viernes, 12 de febrero de 2010

La felicidad líquida


....Vacia tu mente.....
....Libérate de las formas....
Como el agua. 
Pon agua en una botella y será la botella.
Ponla en un tetera, y será la tetera.
El agua puede fluir.... sé agua, mi amigo. 


¿Qué quería decir Bruce Lee en este conocido anuncio? ¿Pero qué leñe significa ser una botella, o ser una tetera dependiendo del recipiente? Tal vez el amigo Lee hiciera un canto a la adaptación al entorno.  En mis años como estudiante en la facultad, percibí una gran confrontación entre paradigmas con respecto a la conceptualización de la personalidad humana: por un lado están aquellos quienes consideran que tenemos unos rasgos personales, distintivos e inamovibles en cualquier tipo de situación: Por otro lado, estan aquellos que, al contrario de los primeros, proponen un modelo de persona muy diferente en su discurrir mental y comportamental en función de las circunstancias. 

Reconozco ignorar cuál es el estado actual de dicha discusión académica. Tal vez como auguró un buen profesor de Universidad -que por supuesto los hay-, tal vez la psicología "mude" su piel en psicofisología, y muchos de los ancianos debates queden obsoletos, estériles. Hubo un tiempo donde parte de la humanidad se desvivía por determinar el sexo de los ángeles, o si el sol giraba en torno a la tierra. Viejos tiempos, viejos debates.

En nuestros días, todo nos habla sobre el cambio: la sociedad del conocimiento sustentada en las tecnologías de la información y la necesidad -si puedes, mejor disfruta que sólo se vive una vez- de estar continuamente reciclando nuestros conocimientos sobre la realidad; la interculturalidad provocada por el roce con personas de otros países, de otras formas de ver la vida; los avances en el transporte que facilitan nuestra movilidad por este cada vez más pequeño planeta...

Tal ve el "joie de vivre", el saber vivir, este más relacionado con adaptar nuestra forma de ser al entorno, que el buscar fuentes de la felicidad constantes, duraderas, eternas. Respónde, por favor, con sinceridad: de tus aspiraciones  actuales ¿cuántos de los anhelos infantiles se mantienten? ¿y de tu adolescencia? ¿Tu pareja sigue siendo de la misma manera, exactamente la misma personalidad, que cuando la conociste?. Y tu, ¿eres el mismo de hace cinco años?. ¿Siguen gustándote los mismos grupos musicales, la misma forma de vestir? Tu grupo de amistades, tu opinión sobre cada uno de ellos, sigue imperturbable con el paso del tiempo?

"Yo soy yo y mis circusntancias" vino a decir Ortega y Gasset. Las circunstancias y las repuestas repetitivas ante estas surcaron los hábitos que hoy conforman tu ser. Nuevas situaciones generan nuevas respuestas. La alegría de vivir  puede residir en disfrutar construyendo y ejecutando -implementar- nuevas conductas para sacar lo máximo al dinamismo en el que estamos inmersos de pies a cabeza, divertirse detectando, evaluando y decidiendo sobre esos pequeños detalles, esos matices que cada  nuevo día nos trae y que lo hacen diferente al "ayer" y al "mañana"

Lo dejamos por hoy, tantas semanas lloviendo en esta "Nueva Escocia" en la que se ha convertido Sevilla, me estan afectando.... al final, he seguido el consejo de mi amigro Bruce Lee: me he convertido en agua. Jugaré siendo una botella, y me entretendré en adaptarme al contorno de la tetera lo más fielmente posible cuando sea necesario.  El moldearse como el búcaro que lleva el "aguaó" para los costaleros en Semana Santa, eso tiene que ser el no va más....




4 comentarios:

  1. Adaptarse es la máxima.

    Genial lo de que Sevilla es una "Nueva Escocia". Mejor no se podía describir.

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  2. Gracias Ikaru por el refuerzo. Verás cuando deje de llover... ahora que empiezan a acortarse las noches y las horas de luz empiezan a dominar el pulso de los días... no va a parar en casa ni el reloj de pared.

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  3. Que arte tienes compañero!
    Silvia ;)

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  4. Na más te pido que cuando seas funcionaria Silvia, no te vengas abajo...

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